Dra. Natalia Martínez Medina, El efecto de la COVID-19 en los profesionales de salud de Colombia (medscape.com)
Recopilado por Carlos Cabrera Lozada. Miembro Correspondiente Nacional, ANM puesto 16. ORCID: 0000-0002-3133-5183. 02/01/2022
La presentación de síntomas depresivos, ansiedad y estrés se observó con mayor frecuencia en los trabajadores de la salud durante la pandemia de COVID-19 en Barranquilla y Valledupar, según los resultados de 3 instituciones en la Costa del Caribe de Colombia.[1]
Los principales resultados informan una alta proporción de síntomas mentales, incluyendo estrés (59,97%), ansiedad (44,87%) y depresión (23,02%), además los profesionales de salud en urgencias y cuidados intensivos tienen un riesgo de 2 a 3 veces mayor de presentar síntomas graves de estrés, por ejemplo, el personal de cuidados intensivos tiene 64% más probabilidad de presentar síntomas graves de ansiedad y 97% más probabilidad de presentar síntomas graves de depresión.
El Dr. Felipe Guillen, director del Centro de Investigaciones Clínicas y Traslacionales del Hospital de la Misericordia Internacional e investigador principal del estudio, comentó a Medscape en español que fueron llamativos 3 grandes resultados. En primer lugar encontrar que la proporción de los síntomas fue diferente de acuerdo con si el personal era de primera línea de atención frente a segunda línea.
Asimismo, que los factores asociados relacionados con síntomas mentales dependían del estado civil (casados o no), profesión (médicos, enfermeras u otros profesionales de salud), área de trabajo (urgencias u hospitalización) e incluso la edad, pues, por ejemplo, los profesionales de salud entre los 18 y 44 años experimentaban más síntomas de ansiedad que aquellos con una edad mayor o igual a 45 años.
Y finalmente, en cuanto a factores predictivos, otros profesionales de salud como bacteriólogos y terapistas respiratorios tuvieron 2,25 veces más probabilidades de presentar síntomas de ansiedad graves, en comparación con las enfermeras y los médicos.
«Es importante recordar que los síntomas pueden convertirse en trastornos, lo que genera un mayor riesgo de alteraciones mentales en los trabajadores la salud, ya de por sí esto es un problema de salud pública pues permanecen en el tiempo, genera diagnósticos tardíos y grandes alteraciones del sistema de salud, pensándolo desde el valor del recurso humano afectado», mencionó el Dr. Guillén.
Estos resultados son de gran valor para el personal sanitario, los responsables políticos, los pagadores y familiares de los profesionales sanitarios añadió.