Salud sexual y bienestar a lo largo de la vida: convocatoria de ponencias

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Manjulaa Narasimhan, et al. Bola, Órgano Mundial de la Salud. 1 de diciembre de 2023; 101(12): 750–750A. Publicado en línea el 1 de diciembre de 2023. doi: 10.2471/BLT.23.291043

Recopilado por Carlos Cabrera Lozada. Miembro Correspondiente Nacional, ANM puesto 16. ORCID: 0000-0002-3133-5183. 01/12/2023

Resumen

La salud sexual es fundamental para la salud y el bienestar generales, para la dignidad de la persona y para el desarrollo social y económico de las comunidades y los países.1 Hace tres decenios, los participantes en la Conferencia Internacional sobre la Población y el Desarrollo reconocieron que la salud sexual era distinta de la salud reproductiva y más amplia de ella. La salud sexual no se limita al asesoramiento y la atención relacionados con la reproducción y las enfermedades de transmisión sexual.2

La definición de trabajo de la Organización Mundial de la Salud (OMS) de salud sexual es «un estado de bienestar físico, emocional, mental y social en relación con la sexualidad; no es simplemente la ausencia de enfermedad, disfunción o dolencia».3 Desde un punto de vista afirmativo, la salud sexual es un enfoque positivo y respetuoso de la sexualidad y las relaciones sexuales, que incluye «experiencias sexuales consensuadas y seguras, libres de coerción, discriminación, abuso o violencia. Para que la salud sexual sea alcanzada y mantenida, los derechos sexuales de todas las personas deben ser respetados, protegidos y cumplidos».3

La promoción de la salud sexual es uno de los cinco aspectos básicos de la estrategia mundial de salud reproductiva de la OMS de 2004, aprobada por 191 Estados Miembros en la 57ª Asamblea Mundial de la Salud.4 En Transformar nuestro mundo: la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, la meta 3.7 tiene por objeto garantizar el acceso universal a los servicios de salud sexual y reproductiva como parte del cumplimiento del objetivo de desarrollo sostenible relacionado con la salud.5 Sin embargo, a pesar del respaldo de los Estados Miembros a estas iniciativas mundiales, más de la mitad de la población mundial sigue teniendo un acceso limitado o nulo a los servicios de salud sexual y reproductiva a lo largo de su vida.6

Academia Nacional de Medicina