Parati, Gianfranco, et al. Revista de Hipertensión 43(8):p 1296-1318, agosto de 2025. | DOI: 10.1097/HJH.00000000000004053
Recopilado por Carlos Cabrera Lozada. Individuo de Número, ANM Sillón VII. ORCID: 0000-0002-3133-5183. 17/07/2025
Resumen
El interés en la fisiopatología, la medición y las implicaciones clínicas de la presión arterial (PA) nocturna ha aumentado significativamente debido a su fuerte asociación con el riesgo cardiovascular, y su importancia fue reconocida por las guías de la Sociedad Europea de Hipertensión (ESH) de 2023. La regulación nocturna de la PA es compleja y multifactorial, e involucra el ciclo de sueño-vigilia, los ritmos circadianos, el sistema nervioso autónomo, el sistema renina-angiotensina-aldosterona y los mecanismos renales.
La tensiómetro ambulatoria de 24 h es actualmente el método de referencia para la evaluación de la PA nocturna. También se puede utilizar la monitorización de la PA en el hogar, con dispositivos especialmente diseñados y validados con función de medición nocturna de la PA, mientras que las nuevas tecnologías sin brazalete y portátiles tienen un gran potencial, pero requieren una mayor validación.
Los fenotipos de PA nocturna de interés clínico incluyen hipertensión nocturna, aumento de la variabilidad de la PA nocturna y fluctuaciones diurnas y nocturnas alteradas. Entre ellas, la hipertensión nocturna aislada puede considerarse un tipo de hipertensión enmascarada. La variabilidad de la PA tiene relevancia pronóstica, al igual que los cambios de PA día-noche, es decir, el «descenso» nocturno de la PA.
La hipertensión nocturna y la no depresión son particularmente prevalentes en individuos con neuropatías autonómicas, trastornos del sueño (p. ej., apnea obstructiva del sueño), enfermedad renal y trastornos metabólicos o endocrinos, y están relacionados con el daño orgánico mediado por la hipertensión y el riesgo cardiovascular.
Las estrategias terapéuticas dirigidas a la PA nocturna siguen siendo objeto de debate. La cronoterapia (dosificación nocturna de antihipertensivos) ha mostrado resultados inconsistentes en ensayos clínicos. La denervación renal y el tratamiento de los trastornos respiratorios relacionados con el sueño pueden reducir la PA nocturna y mejorar la calidad del sueño. Se necesita más investigación para aclarar aún más la fisiopatología, la medición, las intervenciones terapéuticas y el manejo general de la hipertensión nocturna, temas sobre los que este documento de posición de ESH ofrece una revisión en profundidad.
