Quinn K. La naturaleza excepcional de la atención médica como un bien económico. J Gen Intern Med. 2025 25 de julio. DOI: 10.1007/s11606-025-09736-8
Recopilado por Carlos Cabrera Lozada. Individuo de Número, ANM Sillón VII. ORCID: 0000-0002-3133-5183. 24/08/2025
Resumen
Las propuestas de reforma de la atención médica a menudo difieren en el equilibrio apropiado de los incentivos del libre mercado frente a la participación del gobierno. A menudo se descuida una pregunta básica: ¿es la atención médica, deseable y escasa, similar a otros bienes económicos? Esta perspectiva describe ocho características inherentes a la atención médica que la hacen excepcional como bien económico, no solo en los EE. UU. sino también en otros países ricos. Estos son los siguientes: disparidad en el conocimiento entre paciente y proveedor; disparidad en el poder de negociación; «bienes» mal definidos; aseguradoras que actúan como compradores de pacientes; concentración sesgada de gastos entre individuos; la magnitud de los costos y las consecuencias; límites en la oferta de profesionales de la salud; y una dimensión moral inevitable. La complejidad resultante crea muchas oportunidades para aprovechar financieramente a los pacientes. Incluso sin aprovecharse, las fuerzas del mercado tienen consecuencias predecibles, como negar la atención a quienes no pueden pagar. Si bien los excesos tradicionalmente se han visto limitados por la ética profesional, crece la preocupación de que monetizar la medicina haya ido demasiado lejos. Sin embargo, abordar estas preocupaciones con una mayor participación del gobierno trae sus propios problemas. La intervención puede ser inflexible, política, legalista, costosa y de talla única. Las fuerzas del mercado también pueden funcionar bien cuando los productos y servicios están bien definidos, las fuentes de información son buenas, los compradores tienen tiempo para elegir con cuidado y las barreras de entrada son modestas. La política de salud es difícil porque el equilibrio adecuado entre los mercados libres y la participación del gobierno es difícil de alcanzar. Cualquiera que defienda cambios en los mercados, de una forma u otra, debe tener en cuenta la naturaleza excepcional de la atención médica como un bien económico.