Oh, J., Lee, M., Kim, M. et al. Enfermedades alérgicas incidentes en condiciones post-COVID-19: estudios de cohorte multinacionales de Corea del Sur, Japón y el Reino Unido. Nat Commun 15, 2830 (2024). https://doi.org/10.1038/s41467-024-47176-w
Recopilado por Carlos Cabrera Lozada. Individuo de Número, ANM Sillón VII. ORCID: 0000-0002-3133-5183. 19/10/2024
Resumen
Dado que la creciente evidencia sugiere una mayor incidencia de consecuencias adversas, como la alteración del sistema inmunitario, entre los pacientes con antecedentes de COVID-19, nos propusimos investigar las afecciones posteriores a la COVID-19 en un conjunto completo de enfermedades alérgicas, como el asma, la rinitis alérgica, la dermatitis atópica y la alergia alimentaria. Utilizamos cohortes nacionales basadas en reclamaciones en Corea del Sur (K-CoV-N; n = 836.164; cohorte principal) y Japón (JMDC; n = 2.541.021; cohorte de replicación A) y la cohorte del Biobanco del Reino Unido (UKB; n = 325.843; cohorte de replicación B) después de un emparejamiento de la puntuación de propensión 1:5. Entre los 836.164 individuos de la cohorte principal (edad media, 50,25 años [DE, 13,86]; 372.914 [44,6%] mujeres), 147.824 se infectaron con el SARS-CoV-2 durante el periodo de seguimiento (2020-2021). El riesgo de desarrollar enfermedades alérgicas, más allá de los primeros 30 días del diagnóstico de COVID-19, aumentó significativamente (HR, 1,20; IC 95%, 1,13-1,27), especialmente en el asma (HR, 2,25; IC 95%, 1,80-2,83) y la rinitis alérgica (HR, 1,23; IC 95%, 1,15-1,32). Este riesgo disminuyó gradualmente con el tiempo, pero persistió durante todo el período de seguimiento (≥6 meses). Además, el riesgo aumentó con el aumento de la gravedad de la COVID-19. En particular, la vacunación contra la COVID-19 de al menos dos dosis tuvo un efecto protector contra las enfermedades alérgicas posteriores (CRI, 0,81; IC 95%, 0,68-0,96). Hallazgos similares se reportaron en las cohortes de replicación A y B. Aunque la posibilidad de clasificar erróneamente las afecciones alérgicas preexistentes como enfermedades incidentes sigue siendo una limitación, la diversidad étnica para la evidencia de enfermedades alérgicas incidentes en condiciones posteriores a la COVID-19 se ha validado mediante el uso de cohortes poblacionales multinacionales e independientes.