Maria Giulia Conti, et al. JAMA Network Open. 2021;4(11):e2132563. doi:10.1001/jamanetworkopen.2021.32563
Recopilado por Carlos Cabrera Lozada. Miembro Correspondiente Nacional, ANM puesto 16. ORCID: 0000-0002-3133-5183. 06/11/2021
Pregunta ¿Cuál es la asociación de la infección materna por SARS-CoV-2 con la respuesta inmune en la descendencia en los primeros 2 meses de vida?
Resultados En este estudio de cohorte de 21 madres que dieron positivo para SARS-CoV-2 en el parto y sus 22 recién nacidos, hubo 1 caso de posible transmisión vertical del virus madre-bebé y 1 caso de transmisión horizontal del virus. Los bebés que recibieron leche materna durante los primeros 2 meses de vida tuvieron niveles significativamente más altos de anticuerpos IgA salivales específicos de pico en comparación con los bebés alimentados con fórmula, y se detectaron complejos inmunes de pico de IgA en la leche materna.
Significado Los hallazgos sugieren que la protección materna va más allá de la inmunidad pasiva, con complejos inmunes en la leche materna que estimulan el desarrollo activo del sistema inmune neonatal.Abstracto
Importancia Aunque varios estudios han proporcionado información sobre los resultados clínicos a corto plazo en niños con exposición perinatal al SARS-CoV-2, faltan datos sobre la respuesta inmune en los primeros meses de vida entre los recién nacidos expuestos al virus en el útero.
Objetivo Caracterizar la producción de anticuerpos sistémicos y de la mucosa durante los primeros 2 meses de vida entre los lactantes que nacieron de madres infectadas con SARS-CoV-2.
Diseño, entorno y participantes Este estudio de cohorte prospectivo incluyó a 28 mujeres embarazadas que dieron positivo para la infección por SARS-CoV-2 y que dieron a luz en el Policlínico Umberto I en Roma, Italia, de noviembre de 2020 a mayo de 2021, y sus recién nacidos. Las respuestas inmunitarias sistémicas maternas y neonatales se investigaron mediante la detección de anticuerpos específicos de pico en el suero, y la respuesta inmune de la mucosa se evaluó midiendo anticuerpos específicos en la leche materna y la saliva infantil 48 horas después del parto y 2 meses después.
Exposiciones Infección materna por SARS-CoV-2 al final del embarazo.
Principales resultados y medidas La respuesta inmune sistémica se evaluó mediante la detección de anticuerpos IgG e IgA del SARS-CoV-2 y anticuerpos IgM específicos del dominio de unión al receptor en suero materno y neonatal. La respuesta inmune de la mucosa se evaluó midiendo anticuerpos específicos de pico en la leche materna y en la saliva infantil, y se investigó la presencia de complejos inmunes IgA de pico de antígeno-anticuerpo en muestras de leche materna. Todos los anticuerpos se detectaron mediante un ensayo de inmunoabsorción ligado a enzimas.
Resultados En total, se inscribieron 28 díadas madre-hijo (edad materna media [DE], 31,8 [6,4] años; edad gestacional media [DE], 38,1 [2,3] semanas; 18 [60%] lactantes varones) en el parto, y 21 díadas completaron el estudio a los 2 meses de seguimiento. Debido a que la infección materna fue reciente en todos los casos, la transferencia transplacental de anticuerpos IgG específicos del pico del virus ocurrió en solo 1 bebé. Se observó un caso de posible transmisión vertical y 1 caso de infección horizontal. Los anticuerpos IgA salivales específicos de la proteína espiga del virus aumentaron significativamente(P = 0,01) en lactantes alimentados con leche materna (0,99 unidades arbitrarias [AU]; IQR, 0.39-1.68 UA) vs bebés alimentados con una dieta de fórmula exclusiva (0.16 UA; IQR, 0,02-0,83 UA). La leche materna contenía complejos inmunes de pico de IgA a las 48 horas (0,53 UA; IQR, 0,25-0,39 UA) y a los 2 meses (0,09 UA; IQR, 0.03-0.17 UA) y puede haber funcionado como estímulos específicos para la respuesta inmune de la mucosa infantil.
Conclusiones y relevancia En este estudio de cohorte, se detectaron anticuerpos IgA específicos del sars-CoV-2 en la saliva infantil, lo que puede explicar en parte por qué los recién nacidos son resistentes a la infección por SARS-CoV-2. Las madres infectadas en el período periparto parecen no solo proteger pasivamente al recién nacido a través de la IgA secretora de leche materna, sino que también estimulan y entrenan activamente el sistema inmunológico neonatal a través de los complejos inmunes de la leche materna.