Schernthaner, G., Brand, K. y Bailey, C. J. (2022). Metabolismo: clínico y experimental, 130, 155160. https://doi.org/10.1016/j.metabol.2022.155160
Recopilado por José Luis Cevallos González. Miembro Correspondiente Nacional, ANM puesto 4. 13/05/2022
Resumen
La metformina ha estado en uso clínico para el tratamiento de la diabetes tipo 2 durante más de 60 años y está respaldada por una vasta base de datos de experiencia clínica: esto incluye evidencia de cardioprotección de ensayos aleatorios y estudios del mundo real. Recientemente, la posición de la metformina como agente reductor de glucosa de primera elección ha sido suplantada en cierta medida por la aparición de nuevas clases de terapia antidiabética, a saber, los inhibidores del cotransportador de sodio-glucosa-2 (SGLT2) y los agonistas del receptor del péptido-1 similar al glucagón (GLP-1). Estos agentes se han beneficiado a través del apoyo de grandes ensayos de resultados cardiovasculares con diseños de ensayos más modernos que los estudios anteriores realizados para evaluar la metformina. Sin embargo, la investigación clínica sobre la metformina continúa evaluando aún más sus muchos efectos potencialmente ventajosos. Aquí, se revisa la evidencia de mejores resultados cardiovasculares con metformina en el contexto de la era actual de los ensayos de resultados de diabetes. El enfoque se dirige hacia las acciones potencialmente cardioprotectoras de la metformina en pacientes con diabetes tipo 2 e insuficiencia cardíaca (IC), ahora reconocida como la complicación más común de la diabetes.