Hugh Adler, et al. DOI:https://doi.org/10.1016/S1473-3099(22)00228-6
Recopilado por Carlos Cabrera Lozada. Miembro Correspondiente Nacional, ANM puesto 16 . ORCID: 0000-0002-3133-5183. 12/07/2022
Resumen
Los casos de viruela del mono humano rara vez se ven fuera de África occidental y central. Hay pocos datos con respecto a la cinética viral o la duración de la diseminación viral y no hay tratamientos autorizados. Dos medicamentos orales, brincidofovir y tecovirimat, han sido aprobados para el tratamiento de la viruela y han demostrado eficacia contra la viruela del mono en animales. Nuestro objetivo fue describir el curso clínico longitudinal de la viruela del mono en un entorno de altos ingresos, junto con la dinámica viral y cualquier evento adverso relacionado con las nuevas terapias antivirales.
Métodos
En este estudio observacional retrospectivo, informamos las características clínicas, los hallazgos virológicos longitudinales y la respuesta a los antivirales fuera de etiqueta en siete pacientes con viruela del mono que fueron diagnosticados en el Reino Unido entre 2018 y 2021, identificados a través de una revisión retrospectiva de notas de casos. Este estudio incluyó a todos los pacientes que fueron tratados en centros dedicados a enfermedades infecciosas de alta consecuencia (HCID) en Liverpool, Londres y Newcastle, coordinados a través de una red nacional de HCID.
Resultados
Revisamos todos los casos desde el inicio de la red HCID (aerotransportada) entre el 15 de agosto de 2018 y el 10 de septiembre de 2021, identificando a siete pacientes. De los siete pacientes, cuatro eran hombres y tres mujeres. Tres viruelas del mono adquiridas en el Reino Unido: un paciente era un trabajador de la salud que adquirió el virus por nosoconocia, y un paciente que adquirió el virus en el extranjero lo transmitió a un adulto y un niño dentro de su grupo familiar. Las características notables de la enfermedad incluyeron viremia, detección prolongada de ADN del virus de la viruela del mono en hisopos del tracto respiratorio superior, bajo estado de ánimo reactivo y un paciente tenía un absceso de tejido profundo positivo para PCR del virus de la viruela del mono. Cinco pacientes pasaron más de 3 semanas (rango de 22 a 39 días) en aislamiento debido a la positividad prolongada de la PCR. Tres pacientes fueron tratados con brincidofovir (200 mg una vez a la semana por vía oral), todos los cuales desarrollaron enzimas hepáticas elevadas que resultaron en el cese de la terapia. Un paciente fue tratado con tecovirimat (600 mg dos veces al día durante 2 semanas por vía oral), no experimentó efectos adversos y tuvo una duración más corta de la diseminación viral y la enfermedad (10 días de hospitalización) en comparación con los otros seis pacientes. Un paciente experimentó una recaída leve 6 semanas después del alta hospitalaria.
Interpretación
La viruela del mono humano plantea desafíos únicos, incluso para los sistemas de atención médica con recursos adecuados con redes HCID. La diseminación prolongada de ADN viral del tracto respiratorio superior después de la resolución de la lesión cutánea desafió la orientación actual de prevención y control de infecciones. Existe una necesidad urgente de estudios prospectivos de antivirales para esta enfermedad.