El sistema inmunológico adaptativo es importante para el control de la mayoría de las infecciones virales. Los tres componentes fundamentales del sistema inmunitario adaptativo son las células B (la fuente de anticuerpos), las células T CD4 + y las células T CD8 +. El arsenal de células B, células T CD4 + y células T CD8 + tiene diferentes funciones en diferentes infecciones virales y en vacunas, por lo que es fundamental estudiar directamente la inmunidad adaptativa al SARS-CoV-2 para comprender el COVID-19. Ahora se dispone de conocimientos sobre las relaciones entre las respuestas inmunitarias específicas de antígeno y la infección por SARS-CoV-2. Aunque se necesitan más estudios, ha comenzado a surgir una imagen que revela que las células T CD4 +, las células T CD8 + y los anticuerpos neutralizantes contribuyen al control del SARS-CoV-2 en los casos de COVID-19 tanto no hospitalizados como hospitalizados. Se discuten las funciones específicas y la cinética de estas respuestas inmunes adaptativas, así como su interacción con la inmunidad innata y las implicaciones para las vacunas COVID-19 y la memoria inmunológica contra la reinfección.