Valero Nereida. A propósito de la fiebre amarilla en Venezuela. Invest. clín [Internet]. 2003 Dic [citado 2024 Jun 20] ; 44( 4 ): 269-271. Disponible en: http://ve.scielo.org/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0535-51332003000400001&lng=es.
Recopilado por Carlos Cabrera Lozada. Miembro Correspondiente Nacional, ANM puesto 16. ORCID: 0000-0002-3133-5183. 20/06/2024
Resumen
La fiebre amarilla es una enfermedad infecciosa, perteneciente al grupo de las fiebres hemorrágicas causadas por virus. En un primer momento se creyó que era una enfermedad exclusiva del género humano, pero las investigaciones demostraron que es una zoonosis que afecta también a monos de diferentes especies. Los monos infectados en África y América tropical son la fuente principal de infección, y los mosquitos la transmiten al humano. Este tipo de enfermedad, que sólo aparece de forma accidental en el hombre cuando éste invade áreas de riesgo sin la debida protección, se conoce como fiebre amarilla selvática. Si la persona infectada se desplaza a una zona poblada, puede ser picado por especies semidomésticas de mosquitos como el Aedes aegypti, principales transmisores en las epidemias de fiebre amarilla urbana (1).
En muchos casos, la mayor incidencia de brotes de fiebre hemorrágica puede vincularse directamente con actividades humanas. La roturación de la selva en América del Sur hace que los mosquitos portadores del virus de la fiebre amarilla desciendan hasta los asentamientos humanos, y el crecimiento explosivo de la población en este subcontinente, combinado con las malas condiciones higiénicas y de vivienda, determinan un hábitat adecuado para la multiplicación de los mosquitos portadores de virus.