Yuki Kotani, Nicholas Ryan, Andrew A Udy, Tomoko Fujii, Manejo hemodinámico del shock séptico, Quemaduras y trauma, Volumen 13, 2025, tkae081, https://doi.org/10.1093/burnst/tkae081
Recopilado por Carlos Cabrera Lozada. Individuo de Número, ANM Sillón VII. ORCID: 0000-0002-3133-5183. 24/01/2025
Resumen
El choque séptico es un desafío importante en el manejo de pacientes con quemaduras y lesiones traumáticas cuando se complican por una infección, lo que requiere un soporte hemodinámico rápido y eficaz. Esta revisión proporciona una visión general completa de las estrategias actuales para el manejo de vasopresores y líquidos en el shock séptico, con el objetivo de optimizar los resultados de los pacientes. En cuanto al manejo de los vasopresores, se profundiza en los perfiles farmacológicos y aplicaciones clínicas de las catecolaminas, derivados de la vasopresina, angiotensina II y otros agentes vasoactivos. La noradrenalina sigue siendo fundamental para el tratamiento del choque séptico. La adición de vasopresina, cuando se añade secuencialmente a la noradrenalina, ofrece un efecto vasoactivo no catecolaminérgico con algunos beneficios clínicos y riesgos de efectos adversos. Los agentes emergentes como la angiotensina II y la hidroxocobalamina se destacan por su papel en el shock vasodilatador resistente a las catecolaminas. A continuación, para el manejo de líquidos, actualmente se prefieren los cristaloides para la reanimación inicial, con cristaloides equilibrados que muestran beneficios sobre la solución salina. La aplicación de la albúmina en el choque séptico amerita más investigación. Las pruebas de alta calidad no apoyan la reanimación con líquidos de gran volumen, y se recomienda una estrategia individualizada basada en los parámetros hemodinámicos, incluido el aclaramiento de lactato y el tiempo de llenado capilar. El conocimiento existente sugiere que el inicio temprano de los vasopresores, particularmente la noradrenalina, puede ser crítico en los casos en que la reanimación con líquidos no tiene un efecto adecuado. El tratamiento del shock séptico refractario sigue siendo un reto, con nuevos agentes como la angiotensina II y el azul de metileno que muestran potencial en estudios recientes. En conclusión, se necesita más investigación para optimizar el manejo hemodinámico del shock séptico, particularmente en el desarrollo de nuevos enfoques de uso de vasopresores y manejo de líquidos.