Lourdes Herrera Quintana, et al. Niños 2024 , 11 (8), 1030; https://doi.org/10.3390/children11081030
Recopilado por Carlos Cabrera Lozada. Miembro Correspondiente Nacional, ANM puesto 16. ORCID: 0000-0002-3133-5183. 18/09/2024
Resumen
La infancia es un período crítico para el desarrollo del sistema inmunológico, que está muy influenciado por el microbioma intestinal. Asimismo, una serie de factores afectan la composición y diversidad del microbioma intestinal, incluyendo la lactancia materna, la alimentación con fórmula y la introducción de alimentos sólidos. En este sentido, varios estudios han demostrado previamente que la lactancia materna promueve un microbioma favorable. Por el contrario, la alimentación con fórmula y la incorporación temprana de ciertos alimentos sólidos pueden afectar negativamente al desarrollo del microbioma. Además, existe una creciente evidencia de que las alteraciones en el microbioma temprano pueden conducir a condiciones alérgicas e intolerancias alimentarias. Por lo tanto, el desarrollo de estrategias para promover una nutrición infantil óptima requiere una comprensión de la relación entre la nutrición infantil y la salud a largo plazo. La presente revisión tiene como objetivo examinar la relación entre las prácticas de alimentación infantil y el microbioma, así como sus implicaciones en las alergias e intolerancias alimentarias en los bebés. Además, este estudio sintetiza la evidencia existente sobre cómo los diferentes hábitos alimentarios influyen en el microbioma. Destaca sus implicaciones para la prevención de alergias e intolerancias alimentarias. En conclusión, la introducción de alimentos sólidos alergénicos antes de los seis meses, junto con la lactancia materna, puede reducir significativamente los riesgos de alergias e intolerancias alimentarias, asociándose también con variaciones en el microbioma intestinal y complicaciones relacionadas.