Atkins D, et al; Grupo de Trabajo GRADE. Sistemas para calificar la calidad de la evidencia y la solidez de las recomendaciones I: evaluación crítica de los enfoques existentes El Grupo de Trabajo GRADE. BMC Health Serv Res. 2004 Dic 22; 4(1):38. doi: 10.1186/1472-6963-4-38
Recopilado por Carlos Cabrera Lozada. Miembro Correspondiente Nacional, ANM puesto 16. ORCID: 0000-0002-3133-5183. 03/05/2024
Resumen
Se han utilizado varios enfoques para calificar los niveles de evidencia y la solidez de las recomendaciones. El uso de muchos enfoques diferentes resta valor a una de las principales razones para tener enfoques explícitos: caracterizar y comunicar de manera concisa esta información para que pueda entenderse fácilmente y, por lo tanto, ayudar a las personas a tomar decisiones bien informadas. Nuestro objetivo fue evaluar críticamente seis sistemas prominentes para clasificar los niveles de evidencia y la solidez de las recomendaciones como base para acordar las características de un enfoque común y sensato para clasificar los niveles de evidencia y la solidez de las recomendaciones.
Métodos
Se seleccionaron seis sistemas destacados para calificar los niveles de evidencia y la solidez de las recomendaciones, y alguien familiarizado con cada sistema preparó una descripción de cada uno de ellos. Doce evaluadores evaluaron de forma independiente cada sistema basándose en doce criterios para evaluar la sensibilidad de los diferentes enfoques. Se compararon los sistemas utilizados por 51 organizaciones con estos seis enfoques.
Resultados
Hubo poco acuerdo sobre la sensibilidad de los seis sistemas. Solo uno de los sistemas fue adecuado para los cuatro tipos de preguntas que consideramos (efectividad, daño, diagnóstico y pronóstico). Ninguno de los sistemas se consideró utilizable para todos los grupos objetivo considerados (profesionales, pacientes y responsables políticos). Los evaluadores encontraron una baja reproducibilidad de los juicios realizados utilizando los seis sistemas. Los sistemas utilizados por 51 organizaciones que patrocinan guías de práctica clínica incluyeron una serie de variaciones menores de los seis sistemas que evaluamos críticamente.
Conclusiones
Todos los enfoques utilizados actualmente para clasificar los niveles de evidencia y la solidez de las recomendaciones tienen deficiencias importantes.