MASAHIRO J. MORIKAWA, et al. Am Médico de la Fam. 2025; 111(2):148-155, Interpretación ácido-base: un enfoque práctico | AAFP
Recopilado por Carlos Cabrera Lozada. Individuo de Número, ANM Sillón VII. ORCID: 0000-0002-3133-5183. 04/07/2025
Resumen
Los trastornos ácido-base son prevalentes en pacientes críticamente enfermos, y un enfoque sistemático es esencial para la evaluación. El primer paso es determinar el proceso primario en función del pH del paciente, la presión parcial de dióxido de carbono y las mediciones de bicarbonato. Una vez completado esto, el siguiente paso es evaluar la compensación respiratoria o metabólica. Las desviaciones de la compensación esperada pueden indicar procesos ácido-base adicionales. Para la acidosis metabólica, el cálculo de la brecha aniónica distingue entre la acidosis metabólica con brecha aniónica y la acidosis metabólica sin anión gap. La evaluación de la acidosis metabólica con brecha aniónica incluye el cálculo de la brecha osmolal y la realización de un análisis de brecha entre aniones. La evaluación de la acidosis metabólica sin anión gap implica el cálculo del gap aniónico en orina. Estos análisis identifican posibles etiologías y alteraciones ácido-base adicionales. La evaluación de la alcalosis metabólica comienza con la medición de los niveles de cloruro en la orina para determinar si el proceso es el resultado de la depleción de cloruro. La acidosis respiratoria, causada por la hipoventilación, a menudo es el resultado de una enfermedad pulmonar crónica o disfunción neuromuscular. La alcalosis respiratoria, debida a la hiperventilación, es común en la sepsis, la enfermedad hepática crónica y la embolia pulmonar aguda.
Los trastornos ácido-base son comunes en pacientes gravemente enfermos.1 Un enfoque sistemático para evaluar estos trastornos proporciona información diagnóstica vital y guía el tratamiento oportuno.De 2 a 5 años La acidosis provoca acidemia (pH inferior a 7,38)6 y suele deberse a uno de tres factores: (1) acumulación de ácidos (p. ej., ácido salicílico, cetoácidos, ácido láctico) o pérdida de álcali (como en la diarrea o la acidosis tubular renal proximal); (2) disminución de la excreción renal de ácido (como en la insuficiencia renal o la acidosis tubular renal distal); o (3) acumulación de dióxido de carbono en el cuerpo. La alcalosis es un proceso que conduce a la alcalinemia (pH superior a 7,42) y es causada principalmente por la exhalación excesiva de dióxido de carbono (alcalosis respiratoria), la acumulación de álcali (bicarbonato de sodio [HCO3] administración) o pérdida de ácido (como en el caso de la pérdida gastrointestinal por vómitos y diarrea).7